Las uvas blancas son las auténticas protagonistas de la mesa en Navidades, junto con los interminables entrantes, el marisco, el pavo, etc. Las comilonas de Navidad ya son historia a estas alturas del año, pero te aconsejo que no dejes en el olvido las uvas blancas. Esas que si no te comes, «te traerán un año de mala suerte».

A parte de la superstición en torno a esta fruta, sus innumerables beneficios harán que te enamores de ellas no solo por su poder de traer buena fortuna, sino por todo lo que pueden aportar a tu cuerpo y a tu mente.

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Los 5 poderes destacables de las uvas blancas

Poder antioxidante.

uvas blancasGracias a su gran contenido en resveratrol, te ayudan a proteger tu corazón y tus arterias, manteniéndolas limpias y previniendo así la aparición de enfermedades cardiovasculares. Además, su efecto antiobacteriano te mantendrá lejos de virus y bacterias, manteniendo tus defensas en guardia y rindiendo al 100%.

Poder anti-tumoral.

Magia, no hacen. Llevando a cabo un estilo de vida sano e incluyendo las uvas blancas en tu alimentación habitual, producen un efecto anti-tumoral bastante notorio, previniendo la aparición de algunos tipos de cáncer (mama y colon, entre otros. ¿Cuál es el motivo? Producen un efecto anti-inflamatorio sobre tus células, lo cual previene en crecimiento de aquellas que sean tumorales.

Poder regenerativo.

Está demostrado que comer uvas blancas en tu dieta habitual mejora la función cognitiva y cerebral a largo plazo. Algunas de las mejoras más significativas es la mejora de la memoria y la mejora de la función neuronal.

Poder depurativo.

Su componente mayoritario es agua, por lo que son perfectas para facilitar la eliminación de líquido retenido o incluso para hidratarte cuando no te apetezca beber mucha agua, como puede ser habitual ahora en invierno.

Poder tonificante.

uvas blancasAun siendo mayoritariamente agua y su contenido en calorías bajo, te aportan energía y vitalidad. De hecho, es una de las frutas más recomendadas como recuperador y regenerados muscular después de realizar ejercicio físico.

Por suerte, puedes disfrutar de ellas durante todo el año y, por si fuera poco, son tan versátiles que puedes comerlas en tu ensalada, tu merienda o desayuno dulce, puedes incluso preparar postres con ellas y disfrutar de un zumo bien fresco de uvas blancas.

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